Análisis
Hace par de días, el medio colombiano Noticias Uno publicó un reportaje que esclarece aún más las conexiones del narcotráfico colombiano en la fallida Operación Gedeón del pasado 3 de mayo.
El medio presentó documentos obtenidos recientemente tras un operativo policial que concluyó con la incautación de 400 kilos de cocaína a las afueras de Riohacha, Colombia, localidad costera donde se encontraban los campos de entrenamientos de los mercenarios de la Operación Gedeón.
Además del alijo de cocaína que sería enviado a Estados Unidos a través del Mar Caribe mediante lanchas rápidas, los narcotraficantes de la banda “Los Pachencas” también tenían en su poder documentos secretos de la inteligencia militar colombiana y de las rutas de patrullaje antinarcóticos de Estados Unidos.
Estos documentos en poder de “Los Pachencas”, la banda narcotraficante de más poder de la Alta Guajira según el medio colombiano, indicaban las posiciones geográficas de la Armada colombiana pero también de la Guardia Costera de Estados Unidos, de la DEA y de sus operativos conjuntos con Panamá y otros países caribeños.
Noticias Uno recalca que los narcotraficantes de la Alta Guajira lideran el envío de cocaína hacia Estados Unidos.
En mayo del año pasado fue capturado alias “Flash”, el segundo al mando de la banca “Los Pachencas”. Foto: Policía Nacional de Colombia |
Los mapas filtrados reflejan con exactitud las rutas de patrullaje de aeronaves de Costa Rica y de Nicaragua, también de las patrullas marítimas de Jamaica y República Dominicana, así como de la Fuerza Aérea Colombiana.
Esta información privilegiada en manos de “Los Pachencas” de la Alta Guajira refleja la histórica alianza entre el narcotráfico colombiano, las fuerzas militares del país neogranadino y las autoridades estadounidenses, supuestamente encargadas de prevenir la entrada de drogas al país norteamericano.
Lógicamente, la obtención de los mapas y de las rutas de vigilancia marítima le dio a “Los Pachencas” una enorme ventaja de inteligencia para transportar cocaína por el Caribe hacia Estados Unidos sin ser detenidos.
En este sentido, la filtración presentada por Noticias Uno derrumba las falsas acusaciones que designan a Venezuela como un “narcoestado” que dirige la exportación de cocaína hacia Estados Unidos.
Ha perdido su fundamento la tergiversada imputación del Departamento de Justicia de EEUU contra el presidente Nicolás Maduro y otros altos funcionarios del estado venezolano, señalados de dirigir un supuesto cartel de drogas en alianza con grupos armados de Colombia.
A su vez, el mito de la “cooperación antidroga” de los gobiernos de Donald Trump e Iván Duque también ha quedado socavado, pues estos mapas en manos de “Los Pachencas” estaban en poder de las autoridades militares de Colombia y EEUU, ambas involucradas en un despliegue aeronaval a cargo del Comando Sur ordenado por Trump en abril para reducir el narcotráfico.
Desde el momento en que fue neutralizada la Operación Gedeón, el gobierno venezolano ha presentado pruebas fidedignas que demuestra el involucramiento de agentes de la DEA y de narcotraficantes colombianos en la fallida incursión mercenaria por las costas del país.
Resalta la confesión del mercenario estadounidense contratado por Silvercorp, Airan Berry, quien luego de ser capturado en Chuao (estado Aragua) admitió que el narcotraficante colombiano Elkin Javier López Torres, alias “Doble Rueda”, había sostenido múltiples reuniones en la Alta Guajira con el ex militar Antonio Sequea, quien estaba a la cabeza de la Operación Gedeón.
Pero el apoyo de este narcotraficante iba mucho más allá. El ministro de Comunicación venezolano, Jorge Rodríguez, mostró un material audiovisual donde el ex militar Víctor Pimienta Salazar, involucrado en la preparación de la incursión, confirmó que alias “Doble Rueda” puso a la disposición su finca en la Alta Guajira para la pernocta y entrenamiento de los mercenarios, a quienes también apoyó con armamento y otros recursos logísticos.
De la finca de “Doble Rueda” salieron las dos lanchas que intentaron la incursión armada por Macuto (estado La Guaira), una dirigida por alias “Pantera” y otra por Pimienta, una vez ya se había cerrado el acuerdo con el agente de la DEA, alias “Pepero”, para contar con un suministro de armas y recursos una vez desembarcaran.
A finales del año pasado, el diario El Tiempo de Colombia confirmaba los nexos de alias “Doble Rueda” con la narcobanda de “Los Pachencas”.
El medio agrega que años atrás “ya había sido capturado en dos oportunidades, pero por vencimiento de términos había recuperado su libertad”, esto a propósito de las directrices emanadas por el gobierno colombiano a finales de 2019 con el objetivo de desmantelar su organización de narcotráfico.
“Doble Rueda” se entregó a las autoridades colombianas en Barranquilla en diciembre pasado. Sin embargo, en febrero del año en curso, pocos meses después, “el Juzgado Segundo Penal del Circuito con Funciones de Conocimiento de Barranquilla, le otorgó la libertad, al parecer, por la falta de elementos materiales probatorios que lo vinculen a la investigación que adelantan las autoridades judiciales”, según reseña el medio Diario del Cesar.
A medidos de 2019, en un contexto marcado por la guerra entre carteles del narcotráfico de la Alta Guajira, Jesús María Aguirre, alias “Chucho Mercancía”, líder del grupo criminal “Los Pachencas”, fue abatido.
Este suceso le habría permitido a “Doble Rueda” aumentar su control sobre el negocio del narcotráfico en la zona. Comenta la Revista Semana que “López Torres tendría el control sobre el movimiento de contenedores que hace a través del puerto de Santa Marta”, representando una de las principales estructuras logísticas del narcotráfico en la Alta Guajira.
La inaudita liberación de “Doble Rueda” en febrero pasado fue un factor clave en la preparación de la Operación Gedeón. Nuevamente en la calle, uno de los narcotraficantes más pesados de la Alta Guajira pudo organizar la logística y proveer de recursos a los mercenarios dirigidos por Silvercorp.
Además, se vio beneficiado de los documentos secretos obtenidos por sus aliados “Los Pachencas”, elevando con ello sus envíos de droga y utilizando la inteligencia que brindaban los mapas y rutas de patrullaje para acelerar los preparativos de la incursión mercenaria fallida.
0 Comentarios